martes, octubre 10, 2006

De compras

Qué tardes tan tranquilas que podemos llegar a pasarnos algunas veces. Por supuesto, cuando no hay que acompañar a la novia - mujer - pareja sentimental - a hacer las compras. Este documento ilustra a las mil maravillas a qué me refiero. Veamos, pues, una tarde de compras.

16:00 - Tras realizar los menesteres de la cocina, recibimos el notición: ¡nos vamos de compras al centro! Que mañana hay boda y demás y nos han invitado y hay que destacar. Además ahora son las cuatro y todos duermen la siesta.

16:30 - ¿Por qué hemos tenido que sacar el coche? Hay un atasco del carajo. Se nos cruza un maldito motorista que nos insulta. ¿Así que todos durmiendo la siesta? Yo diría que sólo unos cuantos cientos de miles de imbéciles han pensado como yo... ¡siesta! ¡Bah, quién la necesita cuando puedes estar en un atasco!

17:03 - Llegamos por fin al centro comercial. Ni un puñetero sitio para aparcar. "Ve entrando que aparco", le decimos. Paramos, ella se baja, un idiota nos pita y nos grita justo detrás. Ves un sitio milagroso, pero un listo se cuela. Empiezas a dar vueltas. Piensas que esto no ha hecho más que empezar.

17:29 - Por fin estamos dentro. ¿Dónde se ha metido esta ahora? Como no es grande, la maldita tienda... empezamos a buscar como descosidos.

18:02 - Sudando estamos ya de dar vueltas, esto parece un capítulo de Sin Rastro. La llamamos al móvil, contesta, nos pregunta dónde andamos, y la vemos aparecer por la esquina más próxima. Miramos al cielo y rezamos un Padrenuestro y diez Avemarías para poder aguantar lo que queda de tarde.

18:30 - Media hora dando vueltas. Te vas a sentarte a un banco que hay por allí cerca. Ella regresa al cabo de un tiempo. "Mira qué par de modelitos tan monos..." Tras oír su dulce voz diciendo tales palabras, miras donde ella señala y ves doce vestidos, quince pares de zapatos, veinte pañuelos para el cuello, veinte pares de medias y casi te desmayas, pero aguantas como un campeón.

20:00 - Has aguantado hora y media la siguiente secuencia: ella entra al probador, se prueba el conjuntito, sale, te pregunta, le dices que le queda de puta madre, incluso insistes en que está cañón, pero ella vuelve a entrar alegando que el vestido la hace gorda, que los zapatos no le pegan o que el color no le gusta. Te estás desesperando.

20:30 - Por fin. Sale y se compra un par de vestidos. Por fin, ¡nos vamos! ¡Por fin!
20:31 - Ah, pero ¿tú no te compras nada? La frase deleita nuestros pabellones auditivos externos hasta resonar en el tímpano, donde creemos haber oído mal.
20:35 - Nos hemos probado un Tucci que nos queda como un guante. Salimos del probador y la vemos con diez trajes, veinte corbatas y diecisiete pares de zapatos. ¡¡TIERRA TRÁGAME!!

21:00 - Hemos aceptado probarnos todo para no quedar mal. Piensas que Jack Bauer habría salvado al mundo seis veces en el tiempo que llevas aquí desperdiciado. ¡AAAAAAAAY! Señor... qué santa paciencia.

22:00 - Nos echan del centro porque cierran. Nos llevamos el primer traje que pillamos, ese que le dijimos que nos quedaba bien y después del cual nos hizo probarnos otros seiscientos.

22:01 - Buscando el coche.

22:05 - Entramos al coche. Arrancamos y nos largamos. Dices que el Madrid Barsa debe estar en la segunda parte y a ver si llegas a ver el final.

22:06 - El muy típico comentario sobre el fútbol. Atasco del carajo. Todos los coches han salido a la vez del centro. Miras a tu pareja con los ojos inyectados en sangre del cansancio que corre por tu cuerpo por la tarde allí echada, pero ni se entera. Te vas a quedar durmiendo al volante... de pronto una bocina de un trailer te despierta...

23:00 - Llegas a tu casa y te tiras encima de la cama tal cual vas. AAAAAAAY, qué gusto. (Bronca por no desvestirte. Con lo cansados que vamos... es que ni nos enteramos).

Y esto ha sido todo. Así que por favor, cuando vayamos de compras con ellas, tengamos por seguro que nos exponemos a esto. Incluso puede que esto se quede algo corto.

Yo simplemente aviso...